
15 cosas para disfrutar de Menorca.
¡Buenos días, viajeros! Será por los días grises y fríos que hemos vivido después de este temporal, pero ya estamos pensando en las playas que pudimos pisar este verano en Menorca. Era la segunda vez que visitábamos la isla juntos y volvimos aún más enamorados que la primera vez. De hecho, nos gusta tanto, que nos hemos puesto a pensar cuáles son las cosas que más nos han marcado de la más pequeña de las islas Gimnesias. Como nos ha salido un buen puñado, os enumeramos aquí 15 cosas para disfrutar de la isla como es debido.
Índice del post
1. Binibeca
Binibeca o Binibéquer Viejo es un pueblo pescador con mucho encanto. Sus casitas encaladas y los callejones laberínticos hacen que sea uno de los puntos más visitados de la isla. Algunos detractores no creen que merezca tanta fama por ello, ya que este pueblo se construyó en 1972 imitando las antiguas casas de pescadores, por lo que no es un pueblo del todo real y está hecho claramente por el turista.
Sin embargo, a nosotros nos parece precioso y creemos que vale la pena hacer una visita.
2. Faros de Menorca
¿Alguien más que adore pasear por los alrededores de un faro? Menorca es la isla de los 7 faros y, de verdad, creemos que son dignos de visitar. Nosotros cada vez que hemos ido hemos visitado un par, así que nos quedan pendientes algunas escapadas para hacer todavía. Los faros son el de Cavallería, el de Punta Nati, el de Sa Farola, el de Artrutx, el de l’illa de l’Aire, el de Sant Carles y el de Favàritx. Nuestro preferido sin duda, es este último.

(Nota: El faro de Sant Carles original fue derribado por motivos militares y el que hay actualmente sólo se puede ver si se hace una visita a la Fortaleza de la Mola).
3. Macarella y Macarelleta
Seguramente de las más conocidas y masificadas, pero no nos extraña… ¡Son preciosas! Nuestro consejo es que vayáis bien temprano si quieres disfrutar al máximo. Antes se podía aparcar cerca, pero desde el año pasado sólo se puede ir a pie desde alguna cala cercana o en autobús desde Ciutadella. A la Macarelleta se puede ir andando desde su hermana mayor.
4. Playa de Cavalleria
Otra de las más conocidas de la isla y un contraste total con las playas del sur, que suelen ser de arena clara y aguas turquesas. La playa de Cavalleria se caracteriza por su arena rojiza. Aquí se suelen hacer también baños de arcilla, donde la gente se embadurna el cuerpo con la arena. Nosotros no recomendamos esta práctica, ya que nos han explicado que esto conlleva una erosión de la base de los acantilados de la zona.
5. Cala en Brut
La última playa que mencionamos, aunque esta se caracteriza por su falta total de arena y por sus plataformas de piedra. Desde estos acantilados se puede saltar (¡y es muy divertido, de hecho!) Y se suele ver una larga cola de valientes que se bañan en las aguas de esta manera. De nuevo, si queréis disfrutar bien de ella, id pronto. Se encuentra muy cerca de Ciutadella.
6. Poblado talayótico del Trepucó
A tan sólo 1 km de Mahón se encuentra uno de los poblados talayóticos más grandes que se conservan en la isla. Aunque fue destruido durante la Segunda Guerra Púnica y abandonado repentinamente, se conservan bastante bien los límites de las casas. No queremos aburrir con explicaciones, pero nosotros creemos que es una de las cosas que se deben ver para conocer mejor los orígenes de la isla. La entrada es gratuita.
7. Naveta des Tudons
Otro monumento talayótico que recomendamos visitar. Se trata de una naveta funeraria que data de entre el 1400 aC y el 1000 aC. Está muy bien conservada y se encuentra a 4 km de Ciutadella, en el desvío de la carretera hacia Maó. El precio de entrada de adulto es de 2 €, pero si lo visitáis un lunes no será necesario que paguéis entrada. Si sólo queréis visitar un monumento arqueológico en Menorca, este nos parece más indispensable que el anterior.

8. Ver las vistas desde el Monte Toro
Se trata de la montaña más alta de la isla, así que es un muy buen punto para ver Menorca desde las alturas. Arriba también se puede ver un pequeño santuario o se puede tomar un refresco en la terraza de la cafetería de al lado.

9. Caldereta de langosta en Fornells
Uno de los platos más conocidos de esta isla es la caldereta de langosta y, aunque se encuentra fácilmente en todas partes, uno de nuestros lugares preferidos para probarla es el pueblo pesquero de Fornells, que cuenta con un puerto lleno de restaurantes. Nosotros recomendamos el Restaurante s’Algaret.

10. Helado de piñones en Maó
Quizás en otros sitios no es tan raro, pero nosotros no habíamos visto nunca un helado con sabor a piñones. Por eso cuando vimos que en Sa Gelateria tenían y que la anunciaban tanto, quisimos probarlo. Nos pareció muy bueno, así que, si estáis paseando por Maó y os apetece tomar un helado, tened en cuenta los de este sitio.
11. La mejor tarta de queso de Menorca
Y probablemente del mundo… ¡Dios mío! Mira que nos gustan los cheese cake de todo tipo, pero cuando pedimos este de postre la última vez cuando cenamos en Ciutadella, casi nos peleamos por ver quién se quedaba con el último trozo ¡Qué cosa más buena! El restaurante Aquarium en general nos gustó mucho, pero es que sólo para comer este dulce ya se merece estar en nuestra lista.

12. Pasear por Ciutadella
Tanto las calles del casco antiguo de Ciutadella como el puerto tienen un encanto especial, así que para nosotros es indispensable dedicar un buen rato alguno de los días, tanto de día como de noche. En el puerto hay mucha oferta gastronómica que vale la pena y por el centro hay un montón de sitios buenos para tomar algo y comprar recuerdos o ensaimadas. En verano también hacen mercados artesanales.
13. Atardecer en la Cova d’en Xoroi
La Cova d’en Xoroi es un club musical que se encuentra en una gruta natural junto a Cala en Porter. Está abierta todo el día y por la noche hace de bar musical, pero para nosotros el momento más mágico para ir es durante el atardecer. Está muy lleno y hay que pagar una entrada que te sirve también como consumición. Quizás a algunas personas por el precio no les merece la pena, pero nosotros creemos que, al menos una vez en la vida, hay que ver como se esconde el sol desde aquí.

14. Tomar un cóctel en el Aloha
La primera noche que pasamos en Menorca, ahora hará 5 años, descubrimos este local y nos encantó. Se encuentra en Cala en Porter y es un lugar muy agradable y acogedor para tomar una copa. Para nosotros fue una muy buena acogida en la isla, ¡Seguro que volveremos!

15. Ver las calas del sur desde el mar
Y, por último, una de las cosas que más disfrutamos este verano fue poder ver las preciosas calas del sur de la isla desde el mar. Nos lo recomendaron unos familiares así que no lo dudamos y buscamos una empresa que alquilara barcas a motor sin necesidad de tener título de navegación. Nosotros elegimos Minorboats y comenzamos la ruta en Cala Galdana, pasando por Cala Macarella, Cala Macarelleta, Cala Turqueta y Cala des Talaier. Esta última fue la que más nos gustó y donde pasamos más tiempo. La verdad es que es un capricho, ya que no es una actividad económica (nosotros hicimos medio día en temporada alta por 180 €), pero también lo recomendamos. ¡Un pequeño placer viajero de los que vale la pena!
Esperamos que os guste nuestro listado y que si tenéis recomendaciones o nos queréis mencionar algo que no nos podamos perder de Menorca (porque seguro que volveremos) nos las expliquéis en los comentarios. ¡Lo tendremos en cuenta!

Oporto en un fin de semana (guía).
También te puede interesar

10 cosas que hacer en casa durante el confinamiento.
marzo 22, 2020
Cuando no puedes ir a USA: Cuevas de Can Riera.
febrero 27, 2019